Los caminos del agua
Iniciamos nuestro tercer día en ruta. Hoy toca Alto Tajo en estado puro.
Esta ruta te permite recorrer un tramo del Cañón del río Tajo, protagonista del Parque Natural. Cañones, barrancos, torrentes, manantiales, cascadas y una hermosa laguna nos mostrarán los caminos que el agua recorre en el curso alto del río. Un agradable paseo para conocer mejor el río más largo de la Península Ibérica.
Tras desayunar nos dirigimos a nuestro punto de partida de la ruta » El puente de pescadores» sobre el río Tajo.
La vegetación ha cambiado totalmente con respecto al segundo día, donde tilos, avellanos y abedules eran los protagonistas.
Bajamos hasta el mismísimo tajo y cruzamos el antiguo puente de pescadores. Sitio idílico de aguas remansadas y profundas que invitan al baño y los saltos sobre el mismo rio. La mañana aun es fresca por lo que decimos dejar el baño para la tarde.
Cruzado el puente vamos ascendiendo por el margen izquierda del tajo, entre pinos que nos proporcionan una reconfortante sombra.
Nos desviamos un poco del margen para conocer el famoso meandro abandonado de la Hoya de la Parra. Cuesta imaginar que el rio discurriera entre las dos montañas que tenemos enfrente. Hace miles de años el Tajo circulaba por aquí, y a causa de la erosión del agua acabo estrangulando el codo que formaba el cauce.
Tras el meandro toca visita al pliegue anticlinal de La Parra famoso por su ubicación muy clara ante el espectador, como aislado del resto del paisaje.
La erosión ha dejado al descubiertoa esta espectacular sección de un pliegue anticlinal, en cuyo núcleose sitúan rocas más antiguas quelas que forman los flancos.
En ruta encontramos una de las orquidias típicas de aquí a la vez que buscamos los tesoros del «geocaching».
De la claridad del cauce originada en su día por el rio de nuevo nos ponemos en marcha entre pinos y quejigos. Ya pronto se empieza a oír el bramar del salto.
Por fin alcanzamos lo que aquí se conoce el Mirador del Salto, donde se divisa una magnifica vista del salto de Poveda en la distancia.
Tras unas fotos de rigor nos dirigimos al mismísimo muro que en su día servía de contención de la presa. En principio la idea fue la de construir aquí una central hidroeléctrica, idea que tuvo que descartarse por existir grandes filtraciones de agua por debajo del muro. Finalmente se voló el muro y se creó un salto de agua «Natural».
Sin más nos dirigimos a una de las vistas mas excepcionales del salto. El muro que un día servía como presa nos sirve como mirador donde se puede ver el salto desde arriba. Toca ir en grupos reducidos para asomarse a la caída de agua.
Emprendemos la marcha hacia otro enclave natural del parque natural » La Laguna de Taravilla».
Para ello debemos abandonar el margen del rio y subir de nuevo por una cuesta empinada hasta la zona de la laguna.
Esta laguna fue creada hace miles de años .La Laguna de Taravilla es el humedal más importante del Parque Natural. Posee un elevado interés geológico y ecológico, y en él las aguas subterráneas juegan un papel protagonista.
Las vistas aquí son impresionantes, zona de abundantes fósiles que por falta de tiempo no nos podemos detener a buscar.
Sin embargo la ruta nos regala poder observas dos orugas alimentándose en unas euforbiáceas de lo que en un futro serán unas preciosas Papilio machaon y Hyles euphorbiae.
Vamos camino de la laguna. El sol empieza a calentar con fuerza por lo que aprovechamos a bañarnos en ella. Parada y disfrute de sus limpias y cristalinas aguas. Tal vez encontremos el «tesoro escondido» al cual aluden las historias del lugar.
Tras el baño y descanso nuestra ruta continua para comer. Descendemos por el aliviadero de la laguna hasta la zona del puente colgante sobre el Tajo.
Esta zona es un lugar idílico de aguas tranquilas y playas naturales. No hay lugar mejor para comer !!!
Cruzado el puente de una lado al otro varias veces para contemplar el río desde el, nos disponemos a comer en sus playas. Todo para relajarnos y descansar de la paliza que llevamos encima.
Aquí el agua parece estar más caliente y muchos de nosotros aprovechamos para tomar un baño antes de la comida. Las vistas son formidables y parece que estamos aislados del mundo en un enclave tan singular y bello.
Tras la comida y el baño reanudamos la marcha, cruzamos de nuevo el puente colgante y lo vemos poco a poco desparecer tras nosotros desde el otro lado del río. Comenzamos un suave ascenso entre pinos laricios sin pereza pero con añoranza de lo que dejamos detrás. La vegetación nos envuelve en ciertos tramos, y se salpica de libélulas y mariposas a nuestro paso.
Por fin llegamos al «Salto de Poveda», su inmensidad nos deja mudos y nos invita a sentarnos y contemplar tan bello paisaje. El ruido del agua nos acompaña en todo momento y nos transporta a todo lo vivido en estos días de ruta y montaña.
Pero toca emprender la marcha y enfilar nuestra ultima etapa en este viaje. Subimos la escalinata del salto y nos dirigimos al puente de los pescadores para disfrutar de un ultimo baño en las cristalinas aguas del rio Tajo.
De nuevo el puente de los pescadores, aquel que nos saludo al principio de nuestra ruta, sirve ahora como despedida. Hace calor, asi que los saltos desde su pasarela se suceden entre todos los que formamos el grupo.
Ya nos marchamos……toca salir hacia Madrid, pero antes una ultima foto de todos juntos.
Todos hemos compartido unos dias irrepetibles y que espero que en un futuro recordeis con alegria. Un placer haberos enseñado tan bello paraje y habernos permitido compartirlo con vosotros. El parque Natural del Alto Tajo
Eva y Sito.